A veces tenemos algún tipo de conexión fantástica con algún objeto, con algún lugar o incluso con una situación. En mi caso, he tenido siempre una inclinación fantasiosa con la ciudad de Cajamarca, que nunca había visitado. Desde que he llegado al Perú, he mencionado repetidas veces mi deseo de viajar a esa bella ciudad...luego de varios meses, mi fantasía se hizo realidad. He pisado la ciudad de Cajamarca.
Y el motivo de mi visita no podía ser mejor: me encuentro como invitado al primer Festival de Vientos que se organiza en esta ciudad norteña, y como es ya casi tradición, les comparto mi día a día aquí en mi blog.
